Todavia recuerdo como nos conocimos. No mediriamos ni metro cuarenta, y nos hicimos amigos desde casi el primer instante. Jugabamos en el patio del colegio a la pelota, partiamos ventanas, levantabamos faldas a las niñas, hasta nos castigaban a la par. A ti y a toda la pandilla. Me gustaba cuando quedabamos viernes si y viernes tambien para jugar al futbol teniendo que saltar alguna que otra valla de colegio, o yendo a sitios a tomar por saco para poder jugar entre amigos. Recuerdo broncas, incluso alguna pelea, recuerdo a tu familia, el olor de tu casa. El cachondeito de tu hermano con el gordito, que cabron, me tenia amargado. Que locura es esta vida. Despues de muchos años juntos, mas o menos conviviendo, cada vez mas alejados por las distancias, hasta casi perder el contacto, hasta perderlo. Ahora ya es tarde, despues de mucho tiempo sin saber de ti, me enteré de que te fuiste tan lejos que solo el dia en el que el reloj se me pare nos veremos, que pena amigo porque siempre echaré de menos toda esa infancia convivida contigo, en mayor o menos medida. Este es mi pequeño homenaje a un tio locamente genial, el que de pequeño le preguntabas que qué quería ser y te respondia con toda la naturalidad del mundo "jefe", del cual me estoy arrepintiendo mucho haber perdido el contacto, una pena, porque el contacto esta definitivamente perdido, aunque alguien existe siempre y cuando se le recuerde, o eso dicen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario