miércoles, 26 de diciembre de 2007

Tic tac tic tac

Llueve y hace frío, escucho el agua caer mientras pasa el tiempo, tic tac tic tac. Pasa la Navidad y los niños saltan sobre los charcos. Se escuchan perros aullar por el mal tiempo. Aqui en el sur no hace tanto frio, en comparación al norte, pero te extraño.
Mientras suena el eterno reloj que no se para pienso en como dejo escapar el tiempo, como corre sin darnos cuentas, como todo se hace viejo y se rompe, en como cambian las voces y nos hacemos debiles y la vida se torna triste y monótona en contraposicion de lo que era cuando eramos niños, que cada dia era diferente, cada dia era una historia y una nueva sonrisa. Dejamos pasar nuestro tiempo mientras de sonido de fondo tenemos el tic tac. Hace frio en mi rincón, se oyen toses de enfermos, gruñidos de perros mordiendose, gente que se pelea en las calles. Algo va mal, muy mal, y no sé porque todo va a empezar a ir muy deprisa, demasiado deprisa, cambios bruscos de la noche a la mañana y yo sin poder hacer nada, sin poder cambiar absolutamente nada porque el tiempo no para, solo puedo quedarme petrificado esperando que siga sonando el reloj, tic tac, y mis ojos dejen de llorar por no entender el mundo y ver y empezar a disfrutar del dia, hasta de ese moribundo sonido el cual siempre va a sonar, el tic tac se pare.
Espero ver pronto ese amanecer prometido en los libros, y que sea mas espectacular que ningun otro que hayan vistos mis ojos cansados.
Noto como corre el aire frio por mi espalda, llevando ese tiempo que se escapa, que me roza los oidos y solo oigo eso, el tic tac frio y metalico, que me da escalofrios de solo pensar que cuando se pare, no lo escucharé.
Echo de menos aquellas noches que pasaba a tu lado, y mientras dormias yo escuchaba el tic tac, y por momentos se paraba, y disfrutaba a tu lado de esos segundos, que a mi se me hacian eternos, de olvidarme de toda la mierda que nos rodea, de todos los problemas, los cambios y devenires, y todo mi ser se concentraba en disfrutar de tu mera presencia, de tu olor, tu respiracion y de ese otro tic tac que no para que es tu corazon. Recuerdo con nostalgia que cuando dormias, apoyaba mi oido a tu cuerpo y lo oia, y me tranquilizaba que volvia al mundo real y me sumia en las sombras de la noche....para seguir oyendo ese maldito tic tac nada mas despertarme por la mañana.

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