martes, 8 de abril de 2008



Y yo te encontré en un lugar secreto, y tú no quisite salir a buscarme. Y yo te esperé donde sólo tu y yo sabemos, y tú ni me dijiste ya no te quiero.Y estamos muertos, como aquellos sentimientos, que tú y yo tuvimos.

Pasó ya el tiempo, de darnos besos. Pasó todo a un tiempo infinito. Yo escribía tu nombre y tú me ignorabas. Y miré para adelante, donde no pudiera encontrarte...

Y no veia nada, sólo fantasmas. Descubrí la autodestrucción y la agonía. La agonía de tus besos. Y de tus caricias. Y te eché de menos. Mientras me dispersaba como el azúcar en el agua.

Y un rayo de luz, me despertaba. Y me quedé más de dos dias durmiendo en la cama. Para nada. Para echarte de menos. Mientras me ilusionaba. Y para nada. Sólo oia tu nombre, y todo se distorsionaba.

Sólo pude ver, la audestrucción, y salir a cazar a los bares. Donde te reinventaba, como en los lugares donde nunca estuvimos. Todo se acabó y sólo queda la autodestrucción. Y volver a mi lugar secreto.



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Efectivamente, te leo porque disfruto

:)

Anónimo dijo...

Es increíble como escribes y lo que escribes... hablas de cosas que he vivido o he sentido o sigo sintiendo, y sonrío, aunque precisamente no sea alegria lo que sienta, pero esto debe ser buena señal, debe significar que las heridas que pudiera (o pueda seguir teniendo) se están curando, y como no, a través de las palabras bien encadenadas, como las tuyas.
Gracias por pasarte, dejaste frases bonitas...
:)
Un besito!!!